chupitangas: Las putas tallas...

Las putas tallas...

Estoy realmente indignado...

Tengo dos grandes pasiones (bueno muchas más) las chupitangas y la ropa...

Sé que son paradógicamente incompatibles pero hasta ahora no había sido realmente un problema...

Por varias razones (falta de ejercicio, depre o puro vicio) he engordado un poquito: mido 1,85 y peso 86kg. Según la etiqueta de la báscula de la farmacia estoy casi normal (un kilo más y SOBREPESO)

No es que esté gordo... sólo tengo barriguita y bastante culo, no a lo ancho en plan cartucheras, sino a lo alto (podría apoyar un vaso de cubata sobre él)

Cuando por fin llega el día en que puedo ir de compras, que hacía tiempo que no iba (falta de tiempo y dinero) me ocurre lo siguiente:

Siempre he utilizado en vaqueros la talla 42 o 44 (32 o 34 según la marca) pero desde hace un par de años han ido cambiando poco a poco (sibilinamente), de manera que lo que antes era una 42 ahora es una 44 y la 44 de antes (ahora 46) ¡NO EXISTE!

Cito textualmente lo que me ha dicho una dependienta-zorra hoy: "No tenemos pantalones de su talla"

¡COMO QUE DE "SU TALLAAAAAA"!¡No estoy pidiendo una 54, sino una 44!

Yo entiendo (he trabajado mucho en tienda) que la antigua 46 casi no se recibe con el pedido de un pantalón, sólo un par de prendas, casi nunca se vende en tiendas de ropa joven pero ahora condenan al ostracismo a alguien de una talla 44, o a comprar pantalones de cintura alta en El Corte Inglés estilo Bertín Osborne...

No quiero entrar en éstas polémicas de ahora de lo de medir la masa corporal para Cibeles, pero sí en lo de unificar las tallas...

¡Cómo es posible que ahora no pueda comprarme unos vaqueros!

No estoy tan gordo... ¿Debería de pensar en ir de compras a "tallas especiales"? ¿O empezar a utilizar vestidos?

¿Se supone que con esto me conciencian y dejaré de comer chupitangas o que me volveré vigoréxico?

Estoy flipando...

Ya no es que seamos esclavos de la moda en cuanto a tendencias (que nunca me han importado mucho), sino en cuanto a tener la opción de comprarte un pantalón vaquero de una talla normal para un tío alto y con un poquito de barriga, como yo...

Hay que moderar un poco todo esto, al fin y al cabo la tiendas de ropa cumplen (en parte) una labor básica de servicio (vestir a la población), y como tal deberían estar controladas y con un tallaje establecido por ley...

Lo peor es que lo han conseguido... y ahora me siento mal por el par de chocolatinas que me acabo de comer.